De la UM a Google Polonia
En 2019 descubrió que quería conocer el mundo. Gastón Rial recién se había graduado en la Facultad de Ingeniería (FIUM) de la Universidad de Montevideo (UM) y, un poco motivado a raíz de la notoria movida migratoria a Uruguay por parte de distintos países, se sorprendió lo mucho que desconocía otras culturas. Luego de su primer viaje por Europa, esa idea se volvió mucho más latente y, es por esto que, en mayo del mismo año, no dudó ni un segundo en aplicar a la oportunidad de trabajar en Google Polonia.
Luego de un largo proceso selección y una gran espera a causa de la pandemia por COVID-19, Gastón llegó a la ciudad que hoy es su nuevo hogar, Varsovia.
¿Qué es ser un ingeniero en redes en Google Polonia?
Si bien trabajo en Polonia, formo parte de la región EMEA. Puesto a que los servicios que Google ofrece cumplen ciertos parámetros de nivel de servicio, es preciso que existan equipos en todo el mundo. Estas características son las que lo diferencia de otras empresas multinacionales: es verdaderamente global y multicultural.
Siempre me interesaron las telecomunicaciones y sobre todo las redes de computadoras, pues hoy en día el acceso a internet es casi tan esencial como el agua potable. Me siento preparado para los desafíos del trabajo que tengo por delante. Los docentes de la FIUM dan clases magistrales en la materia.
¿Cómo surgió esta oportunidad?
Luego de ser contactado por un recruiter de Google, a raíz de una oferta de trabajo a la que apliqué en mayo de 2019, tuve una serie de entrevistas remotas. Superada esa etapa, me enfrenté a la prueba decisiva en enero de este año: la entrevista on-site. Tuve que viajar a Dublin (Irlanda) y entrevistarme con 5 grupos de ingenieros que evaluaron mis capacidades en diferentes temas vinculados al rol para el que apliqué.
A principios de febrero, tuve un par de charlas adicionales en las que me enteré que había superado la technical bar y, por lo tanto, era cuestión de tiempo para que me pidieran que fuera a trabajar con ellos. Desafortunadamente, el COVID-19 se apoderó de la situación. Por un par de meses simplemente me llegaba un mensaje para indicar que cuando todo se normalizara podría retomar el proceso de contratación. Finalmente, con el inicio del verano europeo, en junio, me llegó una oferta de Polonia para unirme al equipo de GCP (Google Cloud Platform) como TSE (Technical Solutions Engineer) en redes. Acepté de inmediato.
¿Cómo viviste y sentiste este proceso?
Fue un gran desafío. A partir de octubre-noviembre, previo a la entrevista on-site, me preparé leyendo alrededor de cinco libros y varios títulos que encontré en la biblioteca de la UM, además de blogs, practicando la resolución de problemas, etc. Todo esto lo hice a la par de las 45 horas semanales de mi anterior trabajo en Bold y otras actividades.
Busqué en internet y pude ver que muchas personas no quedan seleccionadas o no aprueban la etapa on-site. En este punto, debo destacar el trato humano y profesional de los recruiters. Ellos te dan para adelante, ofrecen sugerencias para mejorar los puntos débiles de una entrevista y hacen notar en qué puntos uno se destaca para poder tomar ventaja de ello. Por otra parte, su trato durante esta pandemia ha sido esplendido. Honestamente, esperaba que mi contrato se retrasara más tiempo y, sin embargo, siempre que tuve dudas mi recruite fue atento y me respondía para que mantuviera la esperanza de ingresar.
¿En qué aportó tu pasaje por la FIUM a este logro?
La FIUM fue mi casa durante mis primeros años de adultez, donde aprendí y compartí enseñanzas y valores. Parte de mi persona, como la de la mayoría de sus ealumnos, ha quedado marcada por la UM. Allí empecé a darme cuenta de que el mundo era más grande que Uruguay.
Considero que la forma de enseñar es la adecuada. Por ejemplo, veo bien la exigencia de exámenes obligatorios en varias materias, sobre todo en los primeros semestres de la carrera, pues son fundamentales para darte cuenta que nada es "regalado". Para aprobar se debe estudiar y trabajar, y en cierta medida así es la vida.
También destaco la tarea de los asesores, como la del Mag. Rafael Sotelo. Él siempre ha estado dispuesto a responder inquietudes que en los primeros años de la carrera surgen con frecuencia. También al cuerpo docente y no docente. Debo reconocer que su trato ha sido abierto y útil para alcanzar metas a lo largo de esos años.