Dos alumnos de Ingeniería participaron en la Olimpíada Mundial de Matemáticas y obtuvieron para Uruguay el mayor puntaje en su historia
La edición de este año de la Olimpíada Mundial de Matemáticas se realizó en julio en la Universidad de Bath, del Reino Unido, y la prueba fue de dos días. Cada jornada duraba cuatro horas y media y había tres problemas por día. Según Correa, la dinámica fue la siguiente: “Llegamos a UK y tuvimos un día de descanso en el que hicimos la ceremonia de apertura, donde todos los países pasaban al escenario unos instantes para ser aplaudidos”.
“Luego fueron los dos días de prueba y los tres siguientes tuvimos actividades, charlas, torneos de futbol, básquet, bádminton, ping pong, entre otros. Nosotros visitamos Oxford, y visitamos Stonhenge, aunque había más opciones. Finalmente, la ceremonia de clausura”, comentó.
Una mención honorífica
Uruguay obtuvo tres menciones de honor: Tobías Rodriguez, Florecia Sapriza y Gastón Correa: “El tema de los premios es raro en la International Mathematical Olympiad -IMO-, yo sabía que había sacado mención desde que resolví el primer problema en la primera prueba, pues una mención de honor se le da a quien resuelve un problema perfecto. Y las medallas también carecen de cierta emoción puesto que se conocen antes de la premiación. Pero es un logro enorme del que me siento orgulloso” explicó este último.
Gastón es un estudiante de primer año de Ingeniería Industrial en la UM; él se destaca no solo por su dedicación académica, sino también por su pasión por las matemáticas. El año pasado obtuvo una beca para estudiar en la UM y en la actualidad considera que esta brinda “una educación atenta y de apoyo, siempre disponible para satisfacer las necesidades de sus estudiantes”.
Desde cuarto año de escuela, Gastón ha estado involucrado en olimpiadas de matemáticas. Su interés por las competencias internacionales comenzó cuando se clasificó para la del Cono Sur. Inspirado por las experiencias compartidas por otros olímpicos, se fijó el objetivo de participar en la IMO, “la cual es considerada la cúspide de las competencias matemáticas a nivel preuniversitario” comentó.
Su preparación para la IMO 2024 fue intensa: durante el verano, estudiaba cuatro horas al día, cinco días a la semana. A pesar de no clasificar para la de 2023, retomó sus estudios y, junto con otros cinco clasificados, se reunían los jueves en un salón prestado por la UM para resolver problemas de ediciones anteriores de la IMO.
La comunidad de exolímpicos y miembros de la Compartida jugaron un rol crucial en su preparación, pues organizaron talleres y ofrecieron apoyo voluntario y sin fines de lucro. En total, Gastón dedicó alrededor de 150 horas durante el verano, sumando docenas más en el transcurso del año.
Experiencia en la IMO 2024
La participación en la IMO 2024 fue una de las experiencias más memorables para Gastón. Más allá de la competencia, destacó mucho la oportunidad de conocer nuevos lugares y convivir con personas de otros países que comparten su pasión por las matemáticas.
Pese a que Gastón ya no puede participar como alumno en futuras competencias, porque en estas solo intervienen los menores de 20 años, su objetivo es mantenerse activo como exolímpico, apoyando y guiando a otros jóvenes en su camino matemático.