“Aplicar la creatividad para una comunicación más asertiva y humana”

El alumni Hugo Hernández habla sobre su nuevo rol como Senior Director en BCW y su paso por la FCOM
Hugo Hernández Martínez

“Me gusta decir que antes que licenciado en Comunicación y licenciado en Relaciones Internacionales, soy tamborilero. No recuerdo exactamente cuándo fue la primera vez que me colgué un tamboril. Tenía menos de cuatro años. Mi padre me contó que durante el embarazo de mi madre él ponía cassetes con música de candombe para que yo lo escuchara. Es una verdadera pasión y me va a acompañar durante toda mi vida”, cuenta Hugo Hernández Martínez, quien se graduó de la Facultad de Comunicación (FCOM) de la UM en 2009. Para Hugo, actual Senior Director de la empresa BCW (antes Burson Marsteller), la comunicación y el candombe forman parte esencial de su vida profesional y personal. 

En la siguiente entrevista, el alumni de FCOM habla de su paso por la UM, los recuerdos que tiene de los años de estudiante y de su actualidad laboral.  

¿Por qué elegiste estudiar Comunicación?  

Llegué a la Universidad con la firme idea de convertirme en un periodista deportivo. Estaba convencido. Sin embargo, como seguramente nos ocurre a todos durante nuestra vida universitaria, me encontré con una realidad nueva, y aprendí que el mundo y las oportunidades son mucho más grandes que nuestra percepción al momento de comenzar los estudios. Así, mi primer paso fue optar por el periodismo, con especial interés en lo político y lo económico, y ya no pensaba en los deportes.   
 
El segundo paso fue empezar a pensar cosas de la vida cotidiana en clave de comunicación. Ahí me di cuenta de que también podría crecer brindando asesoramiento a empresas y organizaciones. Lo que finalmente ocurrió es que la Licenciatura solo avivó el fuego que me impulsaba a aprender, a investigar, conocer más cosas.  

Fue así que, una vez finalizada la Licenciatura, y ya trabajando, tomé la decisión de continuar mis estudios. Quería saber más, complementar mi conocimiento con algo diferente, que ampliara aún más mi perspectiva de la realidad. Me gradué en la Licenciatura en Relaciones Internacionales de la Universidad de la República (UdelaR) y hoy aprovecho en todo lo posible la experiencia y el conocimiento que me brindaron ambas carreras.  

Al inicio comentaste que, desde chico, te gusta el candombe y el carnaval uruguayo, ¿qué puntos encontrás que tienen en común la comunicación y esta expresión cultural?  

Para mí existe un vínculo muy fuerte entre la cuerda de tambores y mi trabajo profesional. Ambas son actividades que, aunque pudiéramos hacerlas individualmente, se enriquecen infinitamente al hacerlas en equipo. Además, en ambos casos, para hacerlo en equipo se requiere de esfuerzo, constancia, creatividad, orden, y una clara definición de roles, con el debido respeto por el aporte y las responsabilidades que corresponden a cada rol. Creo que ese es su vínculo más fuerte.  
 
¿Cuáles fueron tus primeros pasos en la profesión?  

Comencé trabajando principalmente en periodismo. Trabajé en radio, en el Servicio Informativo de Radio El Espectador, y tuve algunas oportunidades en el diario El País, donde escribí sobre Educación y Salud. En paralelo, aproveché algunas oportunidades que surgieron para trabajar con organizaciones que necesitaban potenciar su comunicación, como Fondation Forge. Luego, en 2011 me invitaron a participar de la etapa inicial de un proyecto de periodismo en digital, eldiario.com.uy, del cual formé parte durante casi un año.  
 
Finalmente, por suerte o cuestiones del destino, en 2012 surgió una oportunidad para sumarme como Ejecutivo de Cuentas al equipo de Burson Marsteller Uruguay, una agencia global de comunicaciones.   

¿Cómo fue comenzar a trabajar en Burson Marsteller Uruguay?  

Un desafío enorme, dado que no tenía mucha experiencia en esa área. A partir de allí, todo fue crecimiento, aprendizaje y desafío permanente. He tenido la oportunidad de trabajar para clientes prestigiosos a nivel nacional e internacional como UPM, Citi Bank, HSBC, Uruguay XXI, Guyer & Regules, Cielo Azul Cementos, ACNUR, la Unidad Alimentaria de Montevideo, entre otros varios.   

En 2018 logré ascender a director de Cuentas y recientemente fui designado Senior Director, desempeñándome como COO de la compañía.  

¿Qué significa este logro para tu carrera profesional?  

Como decía, entré en 2012. Si miro hacia atrás, al momento en que ingresé a la compañía, puedo decir que crecí profesionalmente como nunca lo hubiera imaginado.   

Estoy muy orgulloso de todo lo que he logrado como parte del equipo de BCW (antes Burson Marsteller), y, sobre todo, me siento muy motivado por todo lo que tenemos por delante.   

Mi nueva posición responde a tareas que, de alguna manera, yo había comenzado a asumir en el último año. Tienen que ver con la atención a los clientes, pero también con el apoyo en la gestión del equipo. Me gusta atender y brindar el servicio más profesional posible a los clientes, pero también me motiva muchísimo poder apoyar y ayudar a cada uno de mis compañeros en la tarea.   

El objetivo es siempre el mismo, generar comunicaciones con valor estratégico, que contribuyan a los objetivos del cliente. Estoy convencido de que hoy tenemos que ser cada día más creativos, más eficientes y, sobre todo, más humanos para una mejor comunicación. Tal vez este sea uno de los aprendizajes principales que nos haya dejado la pandemia a nivel profesional, el de aplicar la creatividad para una comunicación más asertiva y humana.  

¿Cómo creés que la formación de la FCOM te ha ayudado en este recorrido?  

No puedo decir algo en particular, porque siento que la FCOM me ha aportado en todo lo que he hecho y he logrado. Convertirse en profesional no es simplemente adquirir conocimiento sobre una serie de herramientas para aplicar cuando sea necesario. Ser profesional es lograr pensar la realidad con una perspectiva integral, ordenada y analítica. Eso me lo dio la FCOM y lo aplico a diario.  

¿Cómo recuerdas tus años como estudiante en la FCOM?  

Con enorme alegría, porque conocí muchas personas que fueron muy importantes para mi crecimiento personal y profesional. Tuve la suerte de integrar una generación (la 2005) con grandes compañeros, pero también con grandes talentos. Personas que hoy se destacan trabajando en empresas y organizaciones de prestigio, y que ya mostraban su valía en aquel momento.   

Fui uno de los más jóvenes de mi generación, llegué a la UM con diecisiete años, y siento que fue un proceso de total y completo crecimiento, en el que aprendí muchísimas cosas que hoy utilizo a diario. Voy a estar siempre muy agradecido por la oportunidad que tuve en la UM y por el apoyo incondicional de mi familia en esa etapa.